jueves, 29 de mayo de 2014

USA: Las Vegas - ¿Qué hacer?

Las Vegas es, sin lugar a dudas, uno de esos viajes que hay que hacer una vez en la vida. Como ya os comenté en el anterior post, el turismo se basa en los hoteles, que son una auténtica obra de arte. Pero además de eso, hay que disfrutar de la vida de la ciudad, es decir, las compras, los casinos, los restaurantes, los espectáculos y, por supuesto, la vida nocturna. 


Aunque parezca que la he buscado en Google, esta foto la hice yo.
1. De compras


Restaurante y tienda Bubba Gump.
Si te encantan las compras, estás en el lugar adecuado. Tienes desde las carísimas tiendas que te cobran con solo mirarlas (Versace, Dior, Louis Vuitton, etc) a tiendas que, aunque no baratas, a un precio bastante asequible teniendo en cuenta la ciudad en la que estás. Si dais un paseo a lo largo del Strip (la calle principal en la que están todos los hoteles) os encontraréis con muchas tiendas (como M&M's o la original Bubba Gump, que además de merchandising tiene un restaurante con las famosas gambas), pero la realidad es que la mayoría de ellas están dentro de los hoteles - lógico, con el calor que hace en la calle -. 

La lógica te guía en este caso: si quieres tiendas caras, ve a Caesar's Palace, Bellagio o Venetian Palazzo. Si quieres tiendas "baratas", ve al Planet Hollywood, MGM o Aria. Una visita obligada en mi opinión son las tiendas de objetos firmados por famosos que abundan dentro del Caesar's Palace. Encontrarás de todo, pero lo que a mí más me gustó sin duda fueron fotos de Lost firmadas por todo el reparto, un puro y una bola de golf firmadas por James Gandolfini, y demás objetos similares de Star Wars, Pulp Fiction, the Godfather, Marilyn Monroe, Jordan, Forrest Gump o Harry Potter. Por desgracia, ninguna bajaba de los 2000$, por lo que le prometí a la dueña que si ganaba esa noche en el casino volvería a por algo. Obviamente no volví a pisar la tienda, por desgracia para mí. 


2. Los casinos

A todos nos gusta apostar. Y si crees que no, es que no has estado en Las Vegas. No os preocupéis que no hace falta jugarte 1000$ cada vez, sino que hay tragaperras en las que puedes jugar con hasta monedas de 0.01$. Yo no iba a ser tan rata, yo jugaba en las de 0.25$ (vale, ¡pero tampoco iba a dejarme el dinero para el resto del viaje ahí!), que parece una tontería pero ganas un dinerillo. Creedme que la primera vez que oyes el famoso sonido diciendo que has ganado se te acelera el pulso y te pones igual de contento que si hubieras ganado 1000$ (aunque realmente hayas ganado solo 5$).

Para los más atrevidos - o los que sepan hacer algo más que tirar de la palanca en las tragaperras -, hay mesas de Blackjack, Poker, ruleta y demás que están ordenadas según el dinero que te quieras gastar. Así que no te preocupes que no te vas a sentar a apostar 10$ y el de al lado 2000$: él será igual de rata que tu. 


777 y 10 dólares en la mano.
Por último, la gran ventaja y el mayor incentivo para no dudar en jugar un rato: los cócteles. Nosotras lo descubrimos por casualidad, pero resulta que mientras estás jugando los camareros te van trayendo los cócteles que quieras. TODOS los que quieras. Y aunque estés en las tragaperras de 25 centavos, no os preocupéis que os tendrán bien atendidos - y recordad que esta gente vive de las propinas, así que aunque no tengas que pagarle nada darle algún dólar aumentará las posibilidades de que te atienda más rápido la próxima vez -.

Tengo la medio obligación de advertiros que jugar engancha y mucho. Porque aunque hayas perdido 50$, cada vez que ganas 5$ el subidón es tal que no puedes dejar de jugar. Así que con moderación, combinad gastar el dinero con que os traigan los cócteles, que era lo que hicimos nosotras. Nosotras nos gastamos entre las tres 150$ en las tres noches, pero a cambio no pagamos ni una copa en todo el viaje. Creedme que nos salió rentable.

3. Los restaurantes

La oferta de restaurantes en Las Vegas es realmente increíble, aunque supongo que es lo mismo que pasa con cualquier ciudad de esta magnitud. Obviamente, hay muchísimos restaurantes carísimos que alimentaban con solo pasar por la puerta, pero por desgracia no es de esos restaurantes de los que puedo hablaros, sino de algunos algo más asequibles para una estudiante. 

Para los desayunos tuvimos muchísima suerte, ya que al ser nuestro hotel Paris había bastantes confiterías francesas en las que había menú de desayuno con croissants y café, que le alegran el día a uno. Si queréis algo más americano - y el ansiado wifi -, Starbucks hay varios, pero el que nos pillaba más cerca a nosotras era el del Planet Hollywood. 

En todos los hoteles hay sitios baratos de pizza o hamburguesa. Nosotras hicimos uso de él la primera noche, que tomamos un trozo enorme de pizza, patatas y refresco por 7$ (eso ahí es baratísimo, de verdad). También estuvimos en un restaurante chino de comida rápida en el Venetian Palazzo (tenía varios restaurantes del estilo en circulo y mesas en el centro, de manera que cada uno podía escoger la comida del sitio que quisiera y sentarse todos juntos), que estaba bastante rico, era barato y tenía wifi gratis. 


The Cowboy
El único restaurante al que quiero hacerle especial mención es uno al que entramos en el hotel New York New York. Por desgracia, no recuerdo su nombre y no lo tengo apuntado por ninguna parte, pero era una típica hamburguesería neoyorquina. Mi hamburguesa sí que recuerdo cómo se llamaba y desde luego cómo sabía. De las mejores hamburguesas que he probado nunca. The Cowboy, con bacon, cebolla caramelizada y queso cheddar. 


4. Los espectáculos

Para empezar, hay que disfrutar de los espectáculos gratis. Aunque hay varios, nosotras fuimos al más famoso de todos, que es uno que se hace diariamente a las 7 de la tarde en el exterior del hotel Treasure Island. Os recomiendo que lleguéis con un poco de antelación porque no seréis los únicos listos que queráis aprovecharos de un espectáculo con danza, música y barcos piratas de forma gratuita. 

Además, hay bastantes espectáculos musicales o de danza. De los más famosos es uno del Circo del Sol, al que desgraciadamente no pude ir por falta de tiempo pero del que se que tiene grandes y geniales críticas.


Lomofoto: Welcome to Fabulous Las Vegas con la cámara La Sardina
Por último, aunque no sea un espectáculo en sí es algo que merece la pena visitar, y eso es el famoso cartel de Welcome to Las Vegas al inicio de la ciudad. Os recomiendo que si habéis alquilado un coche para ir a algún lado aprovechéis para pasar por ahí, porque nosotras fuimos en taxi y, a pesar de asegurarnos 500 veces que no lo haría, el taxista nos abandonó, dejándonos a más de media hora andando de nuestro hotel. Una gracia, vamos.

5. La vida nocturna

Salir de fiesta en Las Vegas es espectacular. Os recuerdo que es la ciudad de los excesos, así que imaginaos eso pero versión fiesta. Vayas por donde vayas te van ofreciendo pases para tal discoteca, tal fiesta o tal concierto. Casi todos los hoteles tienen su propia discoteca, aunque hay alguna más famosas que otras.

Nosotras pretendíamos ir a una de las mayores discotecas, la cual estaba dentro del MGM y que nos habían puesto en lista para entrar ya que ese día iba nose qué Dj super famoso. Cuando fuimos a nuestro hotel Paris a descansar, nos dijeron que en la discoteca del hotel (Chateau) daban copas gratis a las chicas hasta las 12 de la noche. Así que el plan era jugar a las tragaperras para que nos dieran cócteles gratis, ir a Chateau a por las copas gratis y acabar en la super discoteca de MGM. Ya os he dicho que no pagué una sola bebida en Las Vegas.


Mi hermana Iris con Las Vegas de fondo.
Pues bien, hicimos la cola de Chateau un poco aburridas porque pensábamos que iba a ser una discoteca normalilla. Cuando entremos nos dijeron que las bebidas gratis eran arriba en la azotea, lo cual nos fastidió bastante, la verdad. Cogimos el ascensor para subir y cual fue nuestra sorpresa cuando se abrieron las puertas del ascensor y nos encontramos de frente a una de las patas de la torre Eiffel. La azotea de la discoteca estaba dentro de la torre Eiffel, de manera que estaba al aire libre, podías apoyarte en la torre y tenías de frente al Bellagio y el resto de Las Vegas. Una pasada de vistas y de discoteca.

Entre lo que nos encantó la discoteca, las copas gratis, la buena música y el buen ambiente que había decidimos quedarnos y pasar de aquel Dj tan super famoso del MGM. Y fue una gran noche. Así que buscad las ofertas, que las hay, y podréis salir de fiesta por todo lo alto en Las Vegas sin gastaros un duro y sin salir si quiera de vuestro hotel (que gustazo ese de estar en una discoteca a menos de 2 minutos de tu cama). 



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